Perros en tiempos de cuarentena

Ahora que estamos vamos a estar en cuarentena durante un tiempo, es momento de hacer un pequeño resumen de la situación para las personas con mascotas, y dar una serie de pautas y consejos para entretener y hacer más llevadero este confinamiento.

El COVID-19 y los perros

La Dirección General de Derechos de los animales del Gobierno de españa lo deja bien claro en su comunicado:

No existe evidencia científica alguna de que los animales domésticos padezcan ni transmitan el COVID-19. Ni perros ni gatos son portadores del virus, ni lo sufren, ni pueden contagiar a nadie.

Hay una serie de medidas generales recomendadas con animales de compañía:

• Después de tocar al animal hay lavarse las manos. No hay que tocarse los ojos, la nariz o la boca.
• Limpiar, al subir a casa, con gel desinfectante o agua y jabón, las almohadillas y la cola por prevención.

Para las personas que han dado positivos por coronavirus:

• Se recomienda dejar el cuidado de las mascotas a otra persona.
• Usar utensilios nuevos para el animal y no los usados en compañía de la persona positiva.
• Si se es positivo y no se tiene con quien dejar el animal, asegurarse de limpiarse las manos habitualmente, usa mascarilla en presencia del animal y evitar en lo que se pueda el contacto físico.

Qué se permite según el real decreto de alerta:

• Sacar a pasear perros.
• Paseos cortos, solo para cubrir necesidades fisiológicas.
• Sin contacto con otros animales ni personas.
• Lleva botella de agua con detergente para limpiar posteriormente la orina y bolsas para las heces. Priorizar horarios de menor afluencia.
• Se recomienda a los cuerpos de seguridad del Estado soliciten identificación de los animales para evitar lo que se está ofertando en webs de segundamano como “alquiler de perros”.
• Alimentación de colonias felinas. Priorizar horarios de menos afluencia e intentar espaciarlo el máximo de días posibles.
• Alimentar y atender animales en fincas y centros de protección animal. Se recomienda establecer servicios mínimos para atención voluntaria en CPA (centros de protección animal), con autorización escrita de la entidad gestora del mismo o del Ayuntamiento si es de gestión directa.

Las clínicas Veterinarias y centros sanitarios, permanecen abiertos, con medidas de autorregulación establecidas por los colegios de veterinarios, atendiendo solo con cita previa para evitar aglomeraciones en las salas de espera y atendiendo consultas que no puedan posponerse.

Parques y Jardines: Totalmente cerrados.

Comida y perros en tiempos de baja actividad

Durante la cuarentena los perros salen menos y sus paseos son más cortos. Hacen menos ejercicio y deben ir en correa, lo que les impide correr y gastar energía. Si comen la misma ración, engordarán, nada sano para ellos.

Aquí van algunas recomendaciones que os pueden ayudar a controlar el peso de vuestro perros en este periodo de poca actividad:

Si utilizas juguetes dispensadores de comida, sustituye los premios por bolas de pienso de su ración. No le añadas bolas extras, y redúcele la ración habitual.

Los comederos lentos o antivoracidad son una buena opción, pero si no tenéis, podéis hacer uno casero añadiendo una pelota a su bol de comida. Eso le dificultará el acceso a ella y hará que coma más despacio. Otra opción es esparcir el pienso por el suelo para que le dure más la comida y estén más entretenidos y se sacien más.

En resumen, no abuses de los premios y reduce su comida.

Actividades con tu perro en casa

Por lo general, no suelo jugar con el perro en casa para no activarlo. Para eso tiene sus salidas. Para mi el perro equilibrado es activo en la calle y tranquilo en casa. Pero ahora estamos en una situación excepcional, con lo que al no poder jugar en la calle, tendremos que entretener a los perros dentro de casa.

Hay dos tipos de ejercicios: físicos y mentales, y los dos cansan al perro. Los físicos, a no ser que tengamos jardín, una cinta de correr (hay que enseñarlos a utilizarla, no es solo subir el perro a la cinta y echar a correr) o casa grande, son más limitados.

Los ejercicios mentales son muy variados. Empecemos con la obediencia. Podemos enseñarle los comandos básicos: sentarse, tumbarse. Y lo que ya sepan, complicárselo un poco: mantenerse sentado o tumbado pese a haber distracciones (por ejemplo, lanzar un objeto delante de él y que se mantenga en sentado o tumbado), irte a otra habitación y que el perro siga en la misma posición hasta que vuelvas.

También puedes enseñarle a traer cosas. Empieza siempre con objetos fáciles de coger con la boca, y una vez lo tenga dominado, complicárselo un poco más. Si tienes un perro con predisposición a aprender cosas nuevas, puedes enseñarle otros trucos como girar sobre sí mismo, hacer la croqueta, «dispararle» y que se haga el muerto.

No fuerces la capacidad de aprendizaje, hay que tener paciencia y no frustar al perro si no consigue hacer lo que queremos enseñarle.

Otros ejercicios que estimulan mucho al perro son los ejercicios de olfato. Hay de muchos tipos, desde los más sencillos, como seguir el rastro de su comida (lo puedes ir complicando poniéndoles el rastro más esparcidos y lo último escondido) a un poco más complicados (esconder un objeto que conozca en la casa y que lo busque).

Para utilizar el olfato sin usar la vista, el perro debe concentrarse bastante para saber de dónde viene el olor. Eso es un ejercicio mental, y como tal, cansa al perro. ¿Os acordáis cuando estudiabais, que había que concentrarse, lo cansados que acababais? Pues esto es igual.

El aburrimiento da hambre.

Ya hemos mencionado los juguetes dispensadores de comida. Los de tipo Kong (hay muchas marcas, pero la verdad es que éstos son muy resistentes). Aparte del material, elige los que tengan más dificultad para conseguir el premio. Así tardarán más y estarán más entretenidos. Si no tenéis ese tipo de juguetes, también hay opciones para fabricarlos vosotros mismo en casa con objetos cotidianos.

En internet podéis encontrar vídeos y tutoriales de cómo hace un kong casero, una pelota rellenable, o un juguete similar al que uso en el vídeo.

Y si a tu perro le gusta morder objetos, lo mejor y más duradero que hay es el asta de ciervo, producto natural que alivia el estrés y no engorda.

Cachorros y perros mayores

Si la cuarentena te ha coincidido con que tu perro es un cachorro, aparte de todo lo anterior en relación a alimentación, juegos, ejercicios, te damos algunas pautas que os ayudarán a no volveros locos debido a su alto nivel de energía y saber qué hacer y no hacer en determinadas situaciones.

El mordisqueo. Los cachorros tienen a morder mucho las cosas, las manos y los pies de los humanos. Al principio puede parecer muy gracioso que jueguen con tus manos, pero es una mala idea porque luego identifican las manos como un juguete y tienden a hacerlo con todo el mundo. Siempre que muerdan algo indebido, en lugar de decir sólo «no» o regañarle, dale opciones, ofrécele algo permitido a cambio para morder: juguete resistente, hueso… Y cuando están con el cambio de dientes debes insistir mucho en ello.

En cuanto al aprendizaje, es mucho más efectivo sesiones cortas varias veces al día, que pocas y largas. Para no saturar al perro, una vez que haya conseguido aprender lo que le estás enseñando, para, y repítelo al día siguiente para que fije el aprendizaje.

Hay muchísimas cosas que debemos tener en cuenta con un cachorro. Lo trataremos en un artículo aparte. Mientras os recomiendo uno de los mejores libros para cachorros que hay: «Un cachorro en casa«, de Ian Dubar. Os ayudará muchísimo a entender las fases de tu perro y porqué hace las cosas.

Si por el contrario tienes un perro mayor en casa, tienes que tener en cuenta que su energía y su fuerza son menores, y que si tiene dolor o poca movilidad no te centres en enseñarle habilidades que requieran movimiento, mejor más ejercicios mentales y mantenerle la cabeza ocupada para distraerles y no hacerlos vagos al estar todo el día durmiendo.

Cuarentena y trastornos del comportamiento en perros

Demasiado tiempo en casa puede provocar una alta dependencia entre tu perro y tú, lo que puede terminar derivando en una ansiedad por separación cuando volvamos a la actividad normal y el perro vuelva a pasar tiempo solo. Estar juntos las 24 horas va a ser inevitable, pero hay varias recomendaciones que podemos seguir:

Deja espacio al perro, que tenga sus momentos «privados». No dejes que te persiga a todas partes de la casa.

Sé tú quien inicie el juego con él, que no te pida él cuando jugar. Se trata de que el perro entienda que eres tú quien decide cómo y cuando hacer las cosas. Esto se aplica a todas las cosas relacionadas con él, como cuándo darle de comer, cuándo acariciarle… El resultado es el mismo, os divertiréis y disfrutaréis juntos, pero la cabeza del perro entenderá que siempre eres tú quien decide, y eso es bueno. Así se sentirá más seguro cuando volvamos a la rutina y vuelva a pasar tiempo solo porque es decisión tuya, eres su referente.

Otro problema importante que puede surgir tras la cuarentena es si tienes un cachorro de menos de 6 meses. ¿Por qué? Porque está perdiendo toda la etapa de socialización, una de las más importantes, si no la más importante de un perro. Todo lo que aprende un cachorro durante sus 4 primeros meses de vida no lo olvidan nunca. Por eso es tan importante que reciba todos lo estímulos posibles y todas las experiencias posibles que se encontrará a lo largo de su vida. Para que de adulto no se convierta en un perro miedoso, necesita estar con todo tipo de gente, todo tipo de perros, oír todo tipo de ruidos, montar en coche, ir por sitios nuevos…

Esperemos que todo ésto acabe lo antes posible para que nuestros perros vuelvan a la normalidad y la cuarentena les afecte lo menos posible.

Ánimo a todos y a dedicarle momentos de calidad a nuestros perros, estimularles. No humanicéis a vuestros perros, no les quitéis su identidad. Dejad a los perros ser perros para que sean felices.